Y van en lo que transcurrió este año, -según oí decir – unos cuarenta femicidios, siete ya en la primera semana de enero. Treinta y tres al finalizar el mismo. Oigo y veo a familiares de las víctimas quejándose porque sus reclamos de justicia son desatendidos, que mandan cartas al Presidente, a funcionarios intermedios, y que les archivan sus pedidos ¿qué pasa? ¿es que las fórmulas machistas recalcitrantes instaladas en los cromosomas de la sociedad y que producen mujeres víctimas son asimismo las que se desentienden del debido accionar legal?
Violencia social y familiar hubo desde siempre en la sociedad. La de estos últimos años es la mayor, ya que se gesta en la decepción con la vida que tal como está de mal, hoy vivimos. Y no me refiero a la pandemia que tiene lo suyo, sin dudas, hablo de decenios de un país cuya economía no funciona, que cierra puertas a un futuro promisorio, que crea pobreza y desigualdad, adonde la violencia está multiplicada, y lo peor, que no tiene una justicia civil y criminal justa. Que además le garantiza al reo una liviandad supina, lo que favorece la criminalidad y condena doblemente a las víctimas. La justicia garantista es un mal para la sociedad.
Hoy, es una chiquilla que no alcanzó a cumplir sus diecinueve años, apuñalada por un policía de veinticinco en uso de licencia médica de orden psiquiátrico, que estaba a punto de ser enjuiciado por un hecho reciente de violencia contra otra mujer. Sería interesante conocer su foja de servicios a fin de constatar actuaciones. Desde ya, las concernientes a su ingreso a la fuerza policial, toda vez que me consta que es de rigor el examen psicodiagnóstico, previo a una incorporación! Pero no lo sabremos, y a poco ya habrá otro femicidio u otro escandaloso hecho, atento a cómo van las cosas en esta sociedad acosada por el delito y la invalidez para defenderse, sumado al desamparo que ello produce, lo que desde ya desorganiza la vida cada quien y actúa como agigantador de la amenaza. Dentro del campo social, la mujer (mucho más si es joven) está guionada, o sea, metida dentro de su encuadramiento. Le asigna a la experiencia amatoria un espacio que no es comparable al que el hombre le destina. De ahí su pasividad, sumisión y hasta masoquismo. Ello provoca que muchas relaciones adquieran un sesgo violento, fomenta el narcisismo del varón, le devalúa el sentimiento de culpa, al quedar reducido por el de superioridad. No existe un amo sin el esclavo. Ahora bien, si la mujer atina a poner distancia, aún sin el corte de la relación, es esa negación lo que le puede desatar la ira. Un individuo sano, cedería ante el No, pero un necio alimentado por su pulsión de poder, y acosado por la exclusión, va a arremeter. Tal parece ser el motivo de la reacción violenta, reiterada, sistemática que este victimario venía ejerciendo sobre la chiquilla. Muy inexperta ella, desde ya, resulta asimismo llamativo el descuido, a la vista ejercido por su familia, si bien es cierto que hoy en día hay una tendencia al desapego muy temprano a las figuras de amparo. Pero en un pueblo, adonde si hay algo que abunda es el chismerío que permite saber lo cierto y lo incierto de otros, habría sido posible evitar el desenlace de haberse cumplido con la debida obligación de las autoridades de la comisaría local – encubridoras según se dice -, al anular las denuncias sobre el acusado, o sea, un par. También de no haber sido negligentes e incumplidoras las integrantes del Consejo de la Mujer, que derivaron la atención del caso por haber sido el pedido de socorro horas previas al fin de semana.
Pasará el tiempo y ella será una más de la casuística que suma cuentas en los femicidios. Para el agresor, no esperemos otra cosa más que el surgimiento de una defensa seguramente basada en su situación psiquiátrica. En mi larguísima actividad pericial, tengo de estas a cuenta de mi memoria varios casos. Nunca faltan, eso se sabe, toda vez que el Mal no se somete a reglas.
Hola Alicia, coincido plenamente en todo lo que decis.
Hoy me entere del acoso a una leona, que tenia un partifo de hockey en mar del plata. La justicia dispuso custodia policial para todo el equipo, yo me pregunto hay que ser conocido o tuvo que pasar lo de Ursula para que la justicia actue pron tamente??
Soy mama no puedo sacar de mi cabeza la carita y los ultimos pedidos de auxilio de la chiquita.
Ojala esto le abra los ojos a esta siciedad adormecida.
Un gran abrazo.
Hola Alicia, coincido plenamente en todo lo que decis.
Hoy me entere del acoso a una leona, que tenia un partido de hockey en mar del plata. La justicia dispuso custodia policial para todo el equipo, yo me pregunto hay que ser conocido o tuvo que pasar lo de Ursula para que la justicia actue prontamente??
Soy mama no puedo sacar de mi cabeza la carita y los ultimos pedidos de auxilio de la chiquita.
Ojala esto le abra los ojos a esta sociedad adormecida.
Un gran abrazo.