UNO VUELVE SIEMPRE A ESOS VIEJOS SITIOS…

… adonde amó la vida. Especialmente cuando pudo ser su vida retomada entre sus manos. Esto es tomar sus propias decisiones. Y se me hizo necesario hacerlo, habiendo puesto entre las mismas manos mi segundo libro, «Porque te quiero te aporreo». Los libros son silencios que se hacen voz en cuanto uno se mete en ellos. Suelen permanecer desmayados para sólo reanimarse al atisbo de la primera frase, nos acechan, casi diría que nos oyen, y cuando han resultado de utilidad hasta nos cuidan en silencio. A veces también son un peligro, porque pensar también puede serlo. Esos mismos escalones que fueron pisados por sus pacientes para llegar hasta Sigmund Freud en su propio consultorio, fueron recorridos por mis propios pies. Y mi propia energia al servicio de éste, mi nuevo rol de escritora sobre cuestiones psicológicas, que ninguna fuerza de la naturaleza podrá reducir en la medida en que siga funcionando mi cabeza, mi alma y mi corazón como un tifón para hacerle frente.  

2 comentarios en “UNO VUELVE SIEMPRE A ESOS VIEJOS SITIOS…”

  1. “Los libros son silencios que se hacen voz”. … Los “escribidores” andamos siempre buscando el alivio y el refugio de las palabras. En ellas lo encontramos todo y con ellas nos atrevemos, como vos Alicia, que te les animas sin dobleces y pones todos los vocablos al servicio de la síntesis. Y por arte de experiencia nos llegan hechas libro, que puede ser sinónimo de amparo, compañía, enseñanza. Y simplemente una palabra, que ya alcanza!… La vida es una palabra, de nosotros depende que se haga libro o se convierta en intemperie. Gracias por el reparo de tu libro. Sirve para celebrar la vida un poco más y no dejarla arrumbada en biblioteca con el sólo protexto de la frívola decoración… GABRIEL

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